martes, 23 de febrero de 2010

Olvido


Me voy convenciendo de que tengo que enfrentarme al mundo con mi propia mirada, que a cada paso va cambiando, hasta que pueda lograr mi sitio adecuado.

La vida arrastra al olvido.

Las cerezas ya no son coloradas, ni vive en mi cerezo mi hada madrina, sólo hay en él hormigas.

La nave blanca que esperaba se hundió en el mar, y el caballero alado de ojos azules
se perdió entre las palomas.
Las escenas de cuentos y películas se las comió el lobo.
Las olas ya no besan la arena.
Los días se van borrando por las pisadas.
Las rosas tienen manchas doradas...
También sé que es imposible describir un sentimiento ¿como podría hacerlo si no sé describir un color…?
El pasado se va destruyendo.
Las teorías se van al olvido y sólo quedan incontrolables arrugas sedientas de suposiciones y discursos programados.

Sólo son cosas mías

jueves, 18 de febrero de 2010

Sombra

Nos paseamos sigilosos por las horas.
Ceñimos nuestras almas buscado la paz en las sombras.
Recorrimos sentidos….
Tejimos ilusiones con fantasía, mojándonos en el roció.
Derrochamos palabras emborrachándonos con el vino de la poesía.
Creamos una primavera eterna regándola con besos.
Matamos el llanto naciendo a la vida con nuestros sueños.
Caminamos con los ojos cerrados encendiendo las sombras con delicias.
Brilló la aurora, renació el bosque con nuestra risa.
Brillamos como estrellas en el cielo.
¿Te acuerdas…?
Mis ojos navegaron por tus ojos.
Hoy regreso a aquel camino.
Deshago los pasos que dimos.
Crujen las hojas en mis pies,
Como queriendo apagar tu sonido.
Todo es sombra… ya no recuerdo la luz de tus pupilas.
Ya no tiembla mi alma en tus manos
Sólo queda mi sombra reflejada en el río.
Sólo son cosas mías

domingo, 14 de febrero de 2010

Anónimo

De pronto has tentado a mi recuerdo,
como si viniese a buscarme.


Maduro trepaste por mi cuerpo.
Con alas de mariposa rozas raudo
mi pasado.


Maduro estas en mi pecho
lanzando destellos.


Promesas de un regreso…
Amor romántico, efímero…


¿Por qué el amor llega siempre con retraso?
demasiado tarde… demasiado pronto…


Aprendo a mirar de frente la historia,
desde la misma piedra… el mismo árbol…


Los recuerdos no se comparten con nadie;
cada detalle es nuestro:
La hamaca, el silencio, el vino…


De vez en cuando regreso a mis cosas,
y repongo las piezas desperdigadas de mi misma,
y maduro te traigo a mi memoria.

Sólo son cosas mías

jueves, 11 de febrero de 2010

El beso de la rosa

Me besaste con tu olor dulce y fuerte.
Encaramada en tu tallo erecto,
escalaste a mi boca sedienta.


El beso de una rosa como el amor,
va dejando rastro de delicias
y encadena en su brevedad de vida.


Guardar el beso de la rosa, su equilibrio,
es perderse en el olvido.
Es burlarse del destino.


El beso de la rosa se extingue, deambula
en misterio más allá de unos brazos
que se alimentan en deseos.


Es beso tan efímero como un suspiro.
Es un presente que enmudece vacío.
Estremece, se diluye entre sus labios y los míos


El beso de la rosa es un símbolo
de las migajas del tiempo,
de la historia de una vida que declina.


Es una lágrima evaporada e imprescindible
que se saborea fugazmente por el aire.
El beso de una rosa.

Sólo son cosas mías

domingo, 7 de febrero de 2010

Quereres

Va pasando el invierno. Llegará la privara, y sigo aquí de la misma forma que cuando te alejaste de mi lado.
Fue en verano cuando me abrazaste.


Te he quiero con el sol calentando nuestros cuerpos.
Te he querido en las piedras del río que miramos.
Te quise en el árbol donde nos amamos.
Te quise en aquel vino que compartimos.
Te quiero en el humo del cigarro entre mis labios; en las rosas que me diste, en las canciones que escuchamos…
Te quiero en el recuerdo que guardo.
Te quiero porque quiero, y no olvido tus manos, ni tu mirada verde entre tus pestañas.
Te quiero aunque tu no quieras que te quiera...
¡ Si yo en mi querer no mando…!
 Si yo mandase en mis amores… te traería a mi lado.

Sólo son cosas mías