viernes, 16 de septiembre de 2011

Anónimo


Me diste tu nombre.
Tres letras,
para poderte llamar.
Ahora te llamas anónimo.
Dejas tu rastro sin perfil.
Anidas entre la luna y sol
¡No te puedo llamar!
Tus palabras me despiertan
desvelan mi corazón.
Haces remendar el tiempo.
Regreso por tus trazos
a aquel lugar secreto.
Eres anónimo, con nombre
y corazón.
Cuando asoman las sombras,
recuerdo tu tiempo imposible,
el camino nos llevó al olvido
de una tarde imprevista
llena de espacios oscuros
Cuando asome el sol, una mañana,
te citaré en la tarde
he iré diseñándote en aquel
lugar tan nuestro
donde consagré mi amor sin forma.
La distancia es una respuesta dura,
que recuerda el camino
que te llevó al olvido.
Ya se despejaron las sombras
Ya no sé tu nombre
Ya no siento las albas
al contemplar el tiempo sin lunas.
Te he perdido sin lamentos
asumiendo desde mis versos,
el vacío de lo absurdo
Sólo son cosas mías…

sábado, 10 de septiembre de 2011

Instante


¿Es el deseo un sueño?
Te ame primero con mis ojos, luego con toda mi ternura.
Y ahora sólo estás en mi memoria...
Apenas fuimos un instante. Ya casi ni te percibo.
Cuando giro al infinito me estremezco, entro en abismos, y no sé qué hacer con lo que siento recordándote…

Sólo son cosas mías