Abrazamos la luz para
que nos acariciase el aire.
Que no nos roben la tarde,
que en ella quisimos perdernos
para sentirnos besados por el alba,
aunque ya no recordemos nuestras caras.
Coincidimos en un punto
determinado, en un tiempo
del espacio, para luego
perdernos en sensaciones y deseos
sin que significara nada…
Transformamos el mundo,
cargados de penas y nos hicimos
esclavos de un abrazo.
Adquirimos formas absurdas,
dibujando un mundo dorado
saltado como delfines, punzando
nuestras entrañas.
Apenas respiramos, mientras,
los rayos de la luna entre
nuestras piernas se colaban.
De pronto, nos volvimos
piezas gastadas.
que nos acariciase el aire.
Que no nos roben la tarde,
que en ella quisimos perdernos
para sentirnos besados por el alba,
aunque ya no recordemos nuestras caras.
Coincidimos en un punto
determinado, en un tiempo
del espacio, para luego
perdernos en sensaciones y deseos
sin que significara nada…
Transformamos el mundo,
cargados de penas y nos hicimos
esclavos de un abrazo.
Adquirimos formas absurdas,
dibujando un mundo dorado
saltado como delfines, punzando
nuestras entrañas.
Apenas respiramos, mientras,
los rayos de la luna entre
nuestras piernas se colaban.
De pronto, nos volvimos
piezas gastadas.
Fue compartido,
Pero… fue demasiado tarde.
Pero… fue demasiado tarde.
Sólo son cosas mías…