Fue contigo
en un cruce del camino,
en donde cruzamos soledades.
Fuiste tú el que durmió la tarde.
El tiempo nos dejó solos.
Muriéndose mi sueño se fue contigo.
Yahora estoy otra vez en el principio.
La melodía del tiempo
hizo verter la tinta en el espacio vacío.
Quedaron tus pisadas
pegadas en la piedra.
Yacimos en un lugar prohibido.
Vertimos lujuria sobre la tierra
mientras las mariposas volaban de testigos.
La belleza siempre está en lo perdido
que bautiza las sombras
impregnándolo todo.
Lloraron las rocas.
Golpee con rabia mi pecho.
Mis lágrimas tapadas
mojaron todas mis ropas.
Momentos de ternura,
agua, tierra y vino,
hicieron un coctel con lo prohibido.
Fue tu silencio tan complejo…
que quizás todo fue un sueño.
O fue la sombra del agua
que nos hizo cama.
Sólo son cosas mías